Un diseño tiene un componente subjetivo importantísimo. Sin embargo, podríamos decir que un buen diseño es aquel que es fácilmente reconocible y reproducible, se implementa en cualquier soporte con facilidad y se adapta perfectamente sin perder su identidad.
El trabajo para Amua es un claro ejemplo de ésto: un proyecto cuyo inicio era diseñar una marca, ayudar en la elección del nombre, definir el estilo, diseñar un logotipo… e implementarla.
Diseñamos todas las piezas necesarias para una tienda de ropa atendiendo al exterior e interior: logotipo, papelería, merchandising, etiquetas textiles, invitaciones, tarjetas de fidelización, rotulación para los escaparates, rótulos...