¿En qué consistió la campaña?
El mercado está saturado de sartenes que son poco saludables, cuya vida media oscila entre unos pocos meses y 1 año. Todas estas sartenes generan un residuo que acaba en lo vertederos donde crean un problema de reciclaje. No es fácil reciclar sartenes, ya que hay que separar componentes, llevar a cabo un plan de logística inversa… cuanto peor calidad tienen los componentes de una sartén, más difícil es reciclarlos
Este fue el punto de partida para crear la campaña de marketing “¿qué hago con mi vieja sartén?”
El objetivo de esta campaña fue concienciar sobre el deshecho de utensilios de menaje de cocina, su toxicidad, sus componentes y cómo afecta todo ello a nuestra salud.
Con esta campaña desde Inoxibar, se quería apoyar al pequeño comercio, incentivar el reciclaje y transmitir sus valores: «más que fabricantes, apasionados de la cocina»
Para desarrollarla, se colocaron contenedores de cartón en los puntos de venta que quisieron adherirse a la campaña, así como material de merchandising para apoyarla. Se buscaba la implicación del cliente, sólo por traer una sartén vieja, el cliente recibía un descuento especial para comprar una pieza de menaje INOXIBAR en ese mismo punto de venta.